lunes, 14 de enero de 2013

Cerca del suelo.

Quiero una despedida en condiciones, salir un día de la cama y que haya pasado un milenio. Quiero que se me erice la piel y que seas tú la culpa, tú que estás ahí esperando a que yo me enrede y ya no encuentre la salida. Ponerte en evidencia porque-tu-mirada (y tú no lo sabías).

Que me mandes a la cama. Hacerte callar, si quieres. Escaparme de ti y volver con más fuerza, caer en el pozo mientras me arañas la espalda. Que me pidas que te muerda y sentir que tengo unas piernas infinitas. Encontrar tus ojos a la altura de mis rodillas, dentro de mí y fuera de mí y por todos lados. Pegarme tanto a ti que sólo haya sudor, nada más en el mundo (joder, qué sensación tan buena).

Que me muero de ganas de comerte a besos.
(Para los dos es mejor irse a dormir / y para los dos sería lo mejor que fuera juntos).

2 comentarios:

AbrazadoATi dijo...

Pues sí, qué sensación tan buena... Y yo también me muero de ganas ¡Qué casualidad!

Cuidados dijo...

Todo esto... en un par de días, te lo prometo.